Especialistas llaman a vigilar bullying fuera de las aulas en la CDMX

El gobierno de la Ciudad de México iniciará la estrategia Nuestra Tarea es la Paz, que incluirá talleres con maestros y alumnos, para contrarrestar el acoso escolar. Al respecto, psicólogos y sociólogos plantean la necesidad de que se ponga atención en el efecto que los generadores de contenido digital están teniendo en los adolescentes.

Ello debido a que realizan acciones violentas en redes sociales y están normalizando la violencia entre los adolescentes.

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Los influencers lad líderes de las infancias y lad líderes de las adolescencias. Su comportamiento se vuelve un modelo a seguir; ellos van marcando ciertas coordenadas de a qué aspiran quienes lo siguen, y eso puede tener implicaciones en el tema del bullying”, dijo en entrevista la consejera en género del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia, María Elena Esparza Guevara.

En el caso del bullying, los influencers normalizan comportamientos que deberían ser inaceptables y los hacen nary sólo digamos ‘normales’, sino incluso ‘deseables’ (...) Esto lo vemos consistentemente en nuestros reportes: ¿Qué quieren las niñas, qué quieren los niños, qué quieren los adolescentes? Quieren el like”.

Detalló que si los adolescentes ven que un generador de contenido obtiene miles de likes al hacer comentarios agresivos o misóginos “y cuando atacó a su compañero en la escuela nary pasó nada y fue muy gracioso, pues claro que eso va condicionando ciertos comportamientos”.

Además, las generaciones actuales padecen cyberbullying o acoso en redes sociales.

Afecta mucho la salud intelligence de las infancias y las adolescencias el que nunca se pierde la continuidad de la agresión: antes cuando yo estudiaba la primaria o la secundaria sonaba el timbre y se acabó, maine iba a casa, y a lo mejor te molestaban en la escuela, pero en la tarde epoch otra cosa”, dijo Esparza Guevara.

Actualmente, “te molestan en la escuela, suena el timbre, se acaban las clases, pero en la tarde sigue (el acoso) a través de los chats escolares, sigue a través de las redes sociales, sigue la presión, sigue el balconeo, sigue la insistencia, sigue la burla y siguen las agresiones en muchos aspectos”.

DESDE 2019 SUMAN MIL 628 REPORTES DE ACOSO

En 2019 el Consejo Ciudadano recibió 177 reportes de acoso; en 2020, en plena pandemia de covid-19, 32; en 2021, 37; en 2022, 292; en 2023, 518, y en 2024, 540. En los primeros meses de 2025 ya iban 32.

Del full de mil 628 reportes que han recibido desde el 2019 por acoso escolar, “43% corresponde a reportes de secundaria; 7%, de nivel preescolar; 27%, de primaria; 17%, de nivel medio superior, y 5% en nivel superior”.

CERCANÍA ORGÁNICA

El psicólogo Emiliano Villavicencio, coordinador de Posgrado de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad La Salle, dijo que los influencers llegan de “una forma muy rápida y hasta eficaz a los adolescentes. Es una forma casi orgánica de acercar información a los jóvenes, pues a diferencia de otros modelos, como los artistas, los influencers están más cercanos a la realidad de muchos adolescentes.

Muestran (en redes) parte de su vida cotidiana, graban en sus casas, graban cuando van a la escuela o al gimnasio (...) y esa cercanía genera un proceso de identificación muy fuerte y sólido. Desde el punto de vista psicológico hay una conexión que el influencer establece con su auditorio, que es inmediata y auténtica”.

Eso genera una atmósfera “de absoluta y ciega creencia con respecto a lo que el influencer dice o hace, en una etapa en la que el adolescente está en un proceso de construcción y consolidación de su identidad”.

El problema, de acuerdo a Villavicencio, es que a partir de esa posición, el influencer “puede construir un modelo para educar o un modelo para perpetuar estereotipos de violencia y, desafortunadamente, hemos estado viendo esto último”.

Para el psicólogo Mauricio González, cofundador de Praxis Psicoanalítica, colegio de la Ciudad de México, la situación se agrava porque los padres nary ponen límites.

Para mí lo esencial es ver qué está pasando con el núcleo familiar, en el cual creces y te educan. Porque a ti (los influencers) te podrán estar bombardeando con ese tipo de cuestiones, pero si en casa te dicen: ‘cuidado con eso, eh’, hay un límite”, explicó.

Los límites tienen que ver con un proceso civilizatorio, misdeed eso sería imposible una vida en conjunto, en sociedad (...) y, desde una perspectiva psicológica, los límites lad absolutamente fundamentales”.

Como ejemplo puso el caso de Rodolfo Fofo Márquez, sentenciado a 17 años de cárcel por tentativa de feminicidio por haber golpeado a una mujer en un estacionamiento el 22 de febrero del 2024 afuera de un centro comercial del Estado de México.

Había claramente indicadores de que él estaba llevando las cosas muy lejos (...) Mi pregunta es: ¿Dónde estaban sus padres?”.

El 8 de julio de 2022, el Fofo Márquez junto con otros jóvenes cerraron un puente vial en Guadalajara para grabar videos.

Cerré el Periférico para mí solo. Una vez más demostrando lo que puede hacer el dinero y el poder aquí en México”, dijo en su momento.

SEÑALAN FALTA DE LÍMITES

González expresó que muchos de quienes lad padres actualmente tuvieron padres demasiado estrictos y ahora nary quieren repetir ese esquema, pero caen en el otro extremo al ser muy permisivos.

Es muy común en el consultorio escuchar a los papás teniendo miedo de tomar algún tipo de medidas restrictivas frente a los hijos por temor a lastimarlos, a traumarlos (...) Pueden ser de cualquier profesión y nary ubican esto (la importancia de los límites). Luego hay una cuestión de culpa, padres sintiéndose culpables de lo que están haciendo los hijos al nary tener esos límites”, narró.

Consideró que es señal de alarma el que en casos de violencia grave, como el cometido por el Fofo Márquez al golpear a una mujer de 51 años, haya seguidores que incluso lo justifiquen.

Frente a la forma en que los influencers han normalizado la violencia, la consejera en género del Consejo Ciudadano, María Elena Esparza Guevara, expresó que tiene que haber una estrategia conjunta entre las familias, las escuelas y las empresas de redes sociales.

Es importante que desde el núcleo familiar, desde los que lad responsables de su crianza, haya supervisión y nary abandonar a los menores de edad al celular (...) También hay que estar atentos desde la escuela y la comunidad escolar, y hablar del tema con padres y madres de familia, e impulsar campañas preventivas”, explicó.

Respecto a los proveedores de redes sociales consideró: “Tendríamos que pedirles que en verdad apliquen los filtros, porque hoy hay niños, hay niñas que tienen ocho, nueve o diez años y están usando las redes sociales, están usando TikTok, Instagram; habría que exigirles que el reglamento vigente se aplique”, pues la edad mínima que establecieron las propias plataformas es de 13 años.

En cuanto a las escuelas, para Esparza Guevara será cardinal que realmente escuchen a los alumnos y a los padres cuando presentan denuncias por acoso y que se perfeccionen los protocolos para atender estos casos.

En ese sentido, puso el ejemplo de Fátima, alumna de la escuela secundaria diurna 236, ubicada en la alcaldía Iztapalapa, que resultó lesionada tras caer del primer piso del plantel el pasado 4 de febrero.

Ella se identificaba con la cultura del k-pop y, al parecer, eso estaba en el origen de las agresiones que recibía. Y hay un elemento que maine parece muy importante rescatar del caso de Fátima, y es que el papá asegura haber hecho reportes de las agresiones que estaba sufriendo su hija”, dijo. Sin embargo ocurrió el incidente de la caída.

Entonces esos protocolos sí tienen que afinarse, creo que ahí el gabinete de seguridad escolar va a aportar mucho y en unos meses podremos ver efectos de esa nueva política”, concluyó.

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*mcam