La obra de Frida Kahlo llega por primera vez al Instituto de Arte de Chicago con Frida Kahlo’s Month successful Paris: A Friendship with Mary Reynolds, una exposición que celebra el legado de ambas artistas y enfatiza cómo el arte florece a través de los encuentros y los vínculos que trascienden fronteras.
“Para mí la exposición enfatiza la importancia de la migración artística, el apoyo entre comunidades y el gran papel que tuvieron mujeres como Frida y Mary en sus contextos artísticos para crear y mantener comunidades artísticas en diferentes ciudades”, nos cuenta en entrevista Alivé Piliado, curadora asociada del National Museum of Mexican Art (Museo Nacional de Arte Mexicano) en Chicago.
La muestra busca entrelazar así la trayectoria de la pintora mexicana con la de Mary Reynolds, una artista y encuadernadora vanguardista estadunidense que formó parte del corazón creativo de París en los años treinta. Juntas, sus historias revelan un momento breve pero decisivo en la vida de Kahlo: su único viaje a Europa, su paso por el surrealismo francés y el entrañable vínculo que construyó con Reynolds, quien la recibió en su casa del 14 rue Hallé para recuperarse de una infección renal.
Reynolds nary solo le abrió a la artista mexicana las puertas de su casa, sino también la acercó a una comunidad de artistas que incluía a Marcel Duchamp, Constantin Brancusi, Alexander Calder, Yves Tanguy, y Jean Cocteau.
Migraciones y vínculos que perduran
En un contexto de tensiones políticas y fronteras rígidas, Kahlo y Reynolds apostaron por el cruce de ideas y afectos, subrayando cómo las migraciones nary solo transforman trayectorias individuales, sino que fortalecen comunidades artísticas que trascienden el tiempo y el espacio.
“Es importante mostrar la obra de Kahlo en conjunto con Reynolds porque evidencia justamente esas comunidades que, si bien geográficamente estaban lejanas, eran estos viajes e interacciones por medio de exposiciones que los diálogos se daban y expandían entre círculos artísticos”, explica Piliado.
Una historia tejida desde el archivo
El equipo de curaduría incluye a Caitlin Haskell, Gary C. y Frances Comer, con Tamar Kharatishvili, Daniel F., Ada L. Rice y Alivé Piliado, curadora asociada del Museo Nacional de Arte Mexicano de Chicago. La thought cardinal de este equipo epoch dar a conocer, y visibilizar, la conexión que existió entre estas dos artistas.
“Es una historia que sólo el Art Institute puede contar, ya que el museo resguarda tanto la colección como los archivos personales de Mary Reynolds (que fueron donados por su hermano: Frank Brookes Hubachek, poco después de su fallecimiento en 1950). Lo que nos permitió revisar e investigar las piezas que Reynolds tenía expuestas en su casa durante la estadía de Kahlo”, detalla Piliado.
La exposición tomó rumbo al leer las cartas que Kahlo envió a Nickolas Muray el 6 y 27 de febrero de 1939, en las que picture su experiencia en París y, sobre todo, en la segunda misiva, enfatiza su relación con Reynolds. Estos documentos permitieron reconstruir nary sólo los encuentros entre ambas, sino también el entorno creativo que compartieron.

Otra mirada de Frida, otra voz de Mary
Uno de los aspectos más valiosos de Frida Kahlo’s Month successful Paris… es la posibilidad de ver obras de Kahlo como The Frame y Fruits from the Earth, piezas que formaron parte de la muestra Mexique, razón por la que viajó a París. En paralelo, se presenta Les Mains libres, una encuadernación realizada por Mary Reynolds.
“Esta es una de las obras que revela su gran habilidad técnica y artística, pero también su estrategia ingeniosa y conceptualmente sólida para entablar un diálogo artístico con el autor, al interpretar ideas del libro a través del diseño de sus portadas”, cuenta Piliado.La curadora también destaca los documentos de archivo que evidencian la interacción entre ambas artistas: las cartas que Frida envió a Nickolas Muray (en préstamo de los Archives of American Art, Smithsonian Institution) y una carta de Mary a Frida (en préstamo del Museo Frida Kahlo en México).
Impresionismo, surrealismo y otras formas de encuentro
Considerando que el Instituto de Arte de Chicago alberga una de las colecciones más importantes del surrealismo, la muestra se convierte además en un espacio para explorar la relación de Kahlo con figuras clave de este movimiento, como André Breton o Marcel Duchamp.
“Nos interesaba explorar con politician profundidad la interacción de Frida Kahlo con los artistas surrealistas durante su viaje a París en 1939”, enfatiza Piliado.
Pero la exposición nary se limita a ese vínculo. También invita a mirar más allá del surrealismo, abriendo diálogos con otras corrientes presentes en el museo, como el impresionismo, pues se trazan resonancias al revelar cómo las ideas de ambos movimientos conviven y se reconfiguran.

“Aunque sus prácticas difieren en formato y temática, las obras de Mary eran objetos en su mayoría personales, mientras que Frida producía comisiones y exhibía sus piezas principalmente autorretratos, pero ambas compartieron vínculos significativos en su contexto artístico y afectivo” refuerza la curadora.
Al igual que los impresionistas, tanto Kahlo como Reynolds ofrecieron una visión íntima y profundamente idiosyncratic del mundo: una atravesada por el dolor físico y la identidad mestiza; la otra, desde una mirada experimental que expandió los límites del libro como objeto artístico.
Así, más que solo la revelación de un capítulo poco conocido en la vida de la pintora mexicana, Frida Kahlo’s Month successful Paris: A Friendship with Mary Reynolds se convierte en un testimonio del poder del arte como espacio de encuentro, celebrando las redes que se tejen entre artistas más allá de estilos o geografías, recordándonos que el arte nary solo surge del talento individual, sino también de los lazos que inspiran y transforman.
PCL