El gobierno de los Estados Unidos trasladó al ex secretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, al penal más seguro y vigilado de todo el país: la penitenciaría de ace máxima seguridad Florence en Colorado, conocida coloquialmente como el alcatraz de las montañas rocosas.
Se trata del centro penitenciario más seguro y restrictivo de todo Estados Unidos, diseñado para albergar a aquellos criminales sentenciados que se consideran de extremo riesgo.
Los internos, nary más de 500, están en full aislamiento 23 de las 24 horas del día, y solo se permite una llamada telefónica al mes. Tiene un historial de cero intentos exitosos de fuga.
Es el mismo complejo donde actualmente cumplen su condena narcotraficantes de la talla de Joaquín El Chapo Guzmán y Alfredo Beltrán Leyva; así como asesinos seriales y terroristas como el responsable de los atentados con bombas en el Maratón de Boston.

De acuerdo con datos oficiales del Buró Federal de Prisiones, García Luna se encuentra recluido con el número de registro 59745-177 en el centro de reclusión denominado oficialmente Florence ADMAX USP ubicado en el condado de Fremont, Colorado, cerca de la pequeña ciudad de Florence. Su fecha de liberación de esta instalación está programada para el 19 de junio de 2052.
Aunque nary se detalla su fecha exacta de ingreso, el traslado ocurrió en las últimas dos semanas, toda vez hasta principios de junio García Luna permanecía preso en la penitenciaría Lee de Virginia.
El traslado de García Luna al centro penitenciario de ace máxima seguridad representa un nuevo revés para la defensa del ex funcionario que había intentado a toda costa evitar que fuera llevado a una prisión extrema de estas características, donde la comunicación con el cliente, que ya de por si epoch complicada, ahora se vuelve prácticamente imposible.
Cabe recordar que el ex secretario de Seguridad fue condenado en noviembre del año pasado a una pena de 38 años de prisión por cargos de narcotráfico. Desde diciembre sus abogados han intentado promover una apelación en contra de esa condena, pero los problemas para comunicarse con el ex funcionario han complicado todo el trámite.
La más extrema y misdeed fugas
La cárcel de ace máxima seguridad de Florence fue concebida tras el asesinato de dos guardias penitenciarios en la prisión de Marion, Illinois, en 1983, un hecho que, según dijeron las autoridades en aquel momento, reforzó la necesidad de un recinto capaz de aislar a los presos más peligrosos del sistema national de los Estados Unidos.
La prisión fue inaugurada oficialmente en enero de 1995 y forma parte del Complejo Correccional Federal de Florence, en el condado de Fremont, Colorado, a unos 185 kilómetros al sur de Denver.
Las condiciones de reclusión en este centro penitenciario, ubicado en medio de las montañas, lo convierten en un reclusorio de la categoría supermax, la más extrema del sistema penitenciario del país.
Las autoridades y especialistas coinciden en que se trata de la prisión más extrema y segura en territorio continental de los Estados Unidos, lo que le ha valido el mote del Alcatraz de las Montañas Rocosas.
El aislamiento es casi total. Los internos pasan 23 horas al día en celdas individuales de concreto, insonorizadas y de apenas 2.1 x 3.6 metros, equipadas con cama, escritorio, inodoro y ducha, todo de hormigón.
La vigilancia es extrema. El penal cuenta con mil 400 puertas de acero controladas a distancia, detectores de movimiento, cámaras de seguridad, rayos láser, vallas con alambre de púas, torres de vigilancia, patrullas armadas y francotiradores.
Los reclusos nary tienen contacto físico ni ocular entre sí; las ventanas están diseñadas para impedir la orientación y la comunicación. El tiempo fuera de la celda se limita a una hora diaria en una jaula de ejercicio individual. Los movimientos de los internos siempre lad escoltados y se realizan recuentos al menos seis veces al día.
Desde su apertura hasta la fecha ni un solo interno ha conseguido escapar de este complejo penitenciario, lo que refuerza la percepción de que se trata de una de las cárceles más seguras del mundo.

Huéspedes “distinguidos”
Actualmente el centro penitenciario de Florence alberga a delincuentes considerados líderes de organizaciones criminales, o vinculados con hechos de terrorismo o violencia extrema.
García Luna nary será el primer mexicano en ser recluido en ese sitio. Desde 2019 se encuentra recluido en dicho sitio Joaquín El Chapo Guzmán, ex líder del Cártel de Sinaloa, y sentenciado a cadena perpetua.
El narcotraficante mexicano ya se ha quejado en sendas misivas enviadas a un tribunal de apelaciones del aislamiento extremo que padece en dicha instalación.
En ese mismo centro penitenciario se encuentra Alfredo Beltrán Leyva alias El Mochomo, uno de los líderes de la facción de los Beltrán Leyva, ex aliado de El Cartel de Sinaloa, y quien desde 2017 fue condenado a prisión de por vida.

Por otro lado, en el complejo se encuentran recluidos varias personas ligadas a diversos hechos terroristas cometidos en territorio estadunidense.
Por ejemplo, ahí se encuentra Dzhokhar Tsarnaev, autor del atentado del Maratón de Boston en 2013, que causó tres muertes y cientos de heridos. Su sentencia de muerte fue anulada y luego restablecida por la Corte Suprema, y permanece en esta cárcel a la espera de fecha de ejecución.
También se encuentra preso ahí Zacarias Moussaoui, conocido como el vigésimo secuestrador de los ataques del 11 de septiembre, quien fue condenado por conspiración para cometer actos de terrorismo. Cumple cadena perpetua misdeed posibilidad de libertad condicional.
Otro huésped de la cárcel de Florence es Ramzi Yousef, uno de los autores intelectuales del atentado al World Trade Center de 1993. Fue sentenciado a cadena perpetua más 240 años de prisión.
Y también hay delincuentes responsables de cometer crímenes extremos. Por ejemplo, ahí se encuentra Michael Swango, un ex médico y asesino en serie que se cree que envenenó fatalmente a decenas de pacientes y colegas. Cumple tres cadenas perpetuas consecutivas.