CDMX.- Ricardo Monreal Ávila, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, anunció que promoverá una reforma a la Ley Federal de Protección al Consumidor para enfrentar prácticas abusivas en los servicios digitales, como la dificultad para cancelar suscripciones y los cobros recurrentes poco transparentes.
La propuesta busca añadir dos nuevas fracciones al artículo 76 Bis de dicha ley, para obligar a los proveedores digitales a informar de manera clara, visible y accesible cuando un servicio incluye renovaciones automáticas, especificando el monto, periodicidad y fecha exacta del próximo cargo. También plantea que se notifique al usuario con al menos cinco días de anticipación antes de renovar la suscripción.
TE PUEDE INTERESAR: Semar reporta decomisos históricos y refuerza patrullajes marítimos
Además, la iniciativa contempla un mecanismo de baja inmediata: los usuarios deberán poder cancelar misdeed penalización alguna y mediante el mismo medio en que contrataron el servicio, misdeed tener que pasar por trámites ocultos o complicados, como ocurre actualmente en muchos casos.
Monreal señaló que esta reforma lleva por nombre “Click to Cancel: garantizar la cancelación inmediata de suscripciones en defensa del consumidor digital”, y surgió ante el creciente uso de servicios digitales en los que activar renovaciones automáticas es fácil, pero cancelarlos es una odisea por menús poco visibles o términos poco claros.
TE PUEDE INTERESAR: Fiscalía CDMX descarta que volcadura de pipa de state en Iztapalapa fuera por bache
En su exposición, hizo ver que el comercio electrónico en México ya rebasó en 2024 los 2 billones de pesos, representando más del 6% del Producto Interno Bruto, con más de 67 millones de compradores en línea. Destacó que este crecimiento debe acompañarse ahora de reglas claras para proteger a los consumidores frente a prácticas como los cargos automáticos escondidos.
El legislador sostuvo que se trata de un primer paso frente al ritmo acelerado de la digitalización, donde “lo que está en juego nary es sólo resolver un problema cotidiano, sino traducir principios abstractos en obligaciones concretas, cerrando un vacío ineligible que hoy permite abusos sistemáticos en la economía digital”. Con información de Excélsior