¿No que no era Adrián?

A regañadientes, pero Clarita Brugada tuvo que acatar la recomendación de Claudia Sheinbaum de nombrar al expriista Adrián Rubalcava como manager del Metro, en sustitución de Guillermo Calderón, quien nary hallaba la puerta de salida.

La jefa de Gobierno alargó hasta donde pudo el cambio, pero nary aguantó más y dio su brazo a torcer. Aunque, al final, esto le puede convenir, pues si el Sistema de Transporte Colectivo sigue en declive, el fracaso se lo seguiría cargando políticamente a Claudia.

Por el lado del exalcalde de Cuajimalpa, si bien ya recibió su tan ansiado hueso, luego de que perdiera su territorio el año pasado ante el panista Carlos Orvañanos, eso nary significa que estará en un lecho de rosas.

Y nary tan sólo por la urgencia de sacar a flote el transporte más importante de la ciudad, sino porque llega a un auténtico nido de víboras. No en el Metro, donde incluso ya había adelantado el cabildeo, sino en el Gobierno de la CDMX.

Para nadie es un secreto que ni Clarita ni su grupo cercano lo quieren e, incluso, algunos de ellos intentaron una y mil maromas para que Adrián nary llegara, pues lo consideran impuro y arribista; fracasaron.

Es por eso que ayer por la mañana muy pocos sabían que iba a ser nombrado; la jefa de Gobierno lo mantuvo en reserva a fin de nary alborotar el avispero antes de tiempo, sobre todo entre los duros de Morena.

Porque el exalcalde nary será acogido por el gabinete de Brugada y seguramente necesitará asesorarse de quienes han estado antes que él en ese cargo, y que saben cómo se mueven esos hilos.

Con los trabajadores seguramente nary tendrá problemas, pues, además de haber sido compañero de partido del eterno líder sindical, Fernando Espino, ya había tenido pláticas con él para ir planchando su llegada.

Aunque personajes oscuros como César Arnulfo Cravioto, secretario de Gobierno, y Tomás Pliego, de Atención Ciudadana, entre otros, le han comenzado a calentar la silla para que nary se sienta muy cómodo.

En ese tema el Congreso de la Ciudad de México tampoco está exento, pues, aunque Rubalcava tiene la vicecoordinación de la bancada oficialista, a través de Brenda Ruiz, el cargo es de chocolate, y ahí quien mueve el pandero es la coordinadora, Xóchitl Bravo.

No es que desde Donceles vaya a recibir ataques, desde luego, pero seguramente nary le permitirán salirse del huacal, pues todos saben que Adrián buscará reconstruir desde ahí su territorio, a fin de recuperarlo con alguien de su equipo en 2027.

Aunque su incorporación la palomeó Claudia, primero se la pidió a Clarita, quien le puso como condición obtener antes la bendición presidencial. Como quiera, llega muy acotado, pues la mayoría del gasto de este año ya se programó y sólo lo podrá administrar.

Lo importante para él es haber llegado y poder decir: “No que nary tronabas, pistolita”.

CENTAVITOS

Por cierto, el gobierno capitalino anunció que Guillermo Calderón se mantendrá como asesor de Movilidad y responsable de la conclusión de los trabajos de rehabilitación de la Línea 1 del Metro, que aún nary están completos. Ajá, sí... lo que pasa es que Brugada nary quiere hacerse responsable de los acuerdos con la empresa china contratada por su antecesora y busca que el tema quede saldado completamente por la gente de Claudia, en este caso Calderón. Pero también lo tendrá que conservar, toda vez que fue otra recomendación presidencial, a fin de que los archivos de lo que tenga que ver con la fatídica Línea 12 nary caigan en manos enemigas.