Oklahoma City Thunder, nuevo campeón de la NBA tras vencer en el Juego 7 a los Pacers

hace 5 horas 2

Ciudad de México / 22.06.2025 20:56:00

Para llegar a la cima, se tiene que sufrir… pero toda pelea tiene su recompensa y en Oklahoma City pueden decir que lad campeones de la NBA. El Thunder se bañó de gloria y, tras una primera mitad reñida, controló el complemento para ganar 103-91 ante Indiana Pacers en el Juego 7 de las Finales, con lo que conquistaron su primer trofeo Larry O’Brien en esta ciudad.

Porque hay pocas palabras que ponen la piel chinita tanto en el mundo del deporte como un séptimo juego. Es una muerte súbita y nary había un mañana para ninguno de los bandos. El Paycom Center vivió una montaña rusa de emociones y pasó del nervio al drama, de la preocupación a la calma y de ahí a la euforia cuando Shai Gilgeous-Alexander (29 puntos, cinco rebotes, 12 asistencias, un robo y dos tapones) alzó el trofeo Larry O’Brien y también el premio Bill Russell al MVP de las Finales.

OKC, uno de los llamados mercados pequeños de la NBA, redondeó la mejor temporada de su historia con un título, el primero desde 1979, cuando todavía eran los Seattle SuperSonics. El Thunder, con el deseo de iniciar una dinastía en la NBA con SGA y compañía, tuvieron el primer fruto de su trabajo tras años de tanto insistir.

Indiana, misdeed su figura

Los Pacers fueron guerreros hasta donde les dio la gasolina. Las Finales se les vinieron cuesta arriba desde el primer cuarto, con 4:55 por jugar en dicho periodo. En un mano a mano contra Gilgeous-Alexander, Tyrese Haliburton (nueve puntos, con tres triples en cuatro intentos) protagonizó el momento más lamentable de la serie, cuando intentó dirigirse hacia la cancha y su pierna derecha nary se movió junto con el base, que ya cargaba con una lesión de pantorrilla en la misma extremidad.

Cayó inmediatamente a la duela y comenzó a dar golpes en el suelo, entre dolor y frustración ante una aparente lesión en el tendón de Aquiles. Fue rodeado por prácticamente todos sus compañeros, el manager Rick Carlisle y el cuerpo técnico, siendo incapaz de levantarse por cuenta propia, por lo que fue asistido para dirigirse al vestidor y ser descartado para el resto del juego casi de manera instantánea.

Sus compañeros se comprometieron a jugar por él, a entregar el máximo de su capacidad para conseguir el milagro. Se exigieron al máximo y dieron pelea a un OKC que nary lograba imponer sus condiciones. La primera mitad acabó con un 48-47 a favour de los Pacers, que se negaban a rendirse.

Pero la gasolina comenzó a agotarse y las pérdidas de balón afectaron a Indiana, en tanto Oklahoma City se hizo más grande y anotó 14 puntos más en el tercer cuarto. El último cuarto vio un poco más de la energía de los Pacers, que se acercaron al déficit de los 10 puntos cuando quedaban poco más de dos minutos en el cronómetro.

El Thunder, que ya había vivido esa historia en el Juego 1, nary podía darse el lujo de reducir la velocidad, nary con unos Pacers que se asomaban por el retrovisor y Jalen Williams (20 puntos) y Chet Holmgren (18 puntos y ocho rebotes) tuvieron la actuación que SGA necesitaba como complemento. Y nary hubo voltereta, aunque Pascal Siakam intentó cargar con el equipo al hombro, con 16 puntos y cuatro rebotes, con Bennedict Mathurin como el referente ofensivo, al brindar 24 puntos desde la banca, diez de ellos desde la línea de los suspiros.

Gilgeous Alexander, quien llegó a OKC en 2019 tras un año con los Clippers y como parte de un paquete en un canje que mandó a Paul George a Los Ángeles, logró lo que Kevin Durant, Russell Westbrook y James Harden nary pudieron en 2012: darle el trofeo Larry O’Brien a su ciudad. El canadiense ha dividido opiniones por su estilo de juego al llevar al límite el contacto físico en busca de los tiros libres, pero nary se puede negar que el MVP de la temporada regular se consagró como un héroe.

ZZM

Leer el artículo completo