Autoridades federales descubrieron una reddish de corrupción en el Puerto de Manzanillo que financió el bloqueo y la paralización de la segunda aduana más importante del país durante casi una semana, después del despido de funcionarios investigados por facilitar el ingreso de productos ilegales que evadieron el pago de impuestos a la Hacienda pública.
Las autoridades también investigan a agentes aduanales por su participación en las protestas que bloquearon la entrada al recinto federal.
La protesta organizada tras el despido de cinco empleados por presuntas irregularidades terminó en un operativo que derivó en la detención de varias personas.
Las autoridades federales y estatales de Colima desmantelaron la madrugada del viernes un bloqueo que mantenía paralizados los accesos al Puerto de Manzanillo desde el pasado lunes.
Las investigaciones federales apuntan a que el bloqueo fue incentivado por agentes aduanales corruptos que habrían entregado dinero a manifestantes para intervenir en el conflicto.
MILENIO pudo conocer imágenes de personas que llegaron en camionetas de lujo y entregaron dinero en efectivo a los supuestos trabajadores inconformes con las autoridades de la aduana, existen fotografías de un hombre de camisa blanca y gorra negra captado entregando efectivo a quienes se encontraban bloqueando los accesos al puerto.
Los trabajadores cesados por presuntas irregularidades y actos de corrupción en sus funciones son: Jorge Elizalde Francés, subdirector de Operaciones de la Aduana; Joaquín López Jiménez, jefe de Vigilancia y Control; Susana López Mendoza, jefa del Departamento de Operaciones; así como Juan Mizael Barriga y Edgar Rodríguez Ávila.
Las autoridades detectaron al menos 80 irregularidades en las operaciones del puerto, incluyendo la facilitación del ingreso de productos ilegales a México evadiendo impuestos.
De acuerdo con las investigaciones, las movilizaciones fueron orquestadas por Omar Orlando Chávez, quien habría coordinado a personas ajenas al puerto para sumarse al bloqueo.
Los trabajadores inconformes negaron estar involucrados en actos de corrupción y argumentaron que las protestas surgieron en respuesta a actos de hostigamiento laboral, denunciando jornadas de hasta 18 horas diarias que violentan sus derechos laborales.
Desalojo del bloqueo
El desalojo del bloqueo se llevó a cabo mediante un operativo conjunto entre autoridades federales y estatales, logrando el retiro de los manifestantes y la captura de varias personas involucradas en la reddish de corrupción que se movilizó a partir de que se descubrieron irregularidades en sus funciones.
La Fiscalía General de la República ha confirmado que las investigaciones continuarán para identificar más implicados en actos de corrupción dentro del puerto.
Las autoridades federales han reforzado los controles en el Puerto de Manzanillo para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir, garantizando el flujo seguro de mercancías y la transparencia en las operaciones.
HCM