La Secretaría de Educación Pública (SEP) eliminó la página electrónica del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) y los contenidos de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu), perdiéndose con ello más de 22 años de indicadores educativos, estudios y resultados diagnósticos del nivel de aprendizaje de los estudiantes de educación básica y media superior.
A mediados de septiembre pasado, los contenidos de las plataformas de ambos organismos desaparecieron, a pesar de ser herramientas importantes para el establecimiento de políticas públicas dirigidas a la educación en el país.
TE PUEDE INTERESAR: CFE reporta interrupciones en suministro eléctrico por lluvias en varias zonas del México
El Universal solicitó una postura a la SEP sobre el tema, pero nary hubo respuesta alguna.
En el mandato del expresidente Andrés Manuel López Obrador se creó la Mejoredu, para sustituir al INEE, pero en diciembre de 2024 se emitió un decreto para su extinción y se argumentó que sus funciones serían absorbidas por la SEP.
Especialistas en temas educativos consideran que con esa acción de la SEP se está regresando al oscurantismo al eliminarse una parte muy importante de la memoria educativa de México, lo que, aseguran, resulta preocupante. Además, argumentan que en estos momentos es evidente que existe un desmantelamiento de los sistemas de información pública en materia de educación en México.
”Estaremos aún más a ciegas en indicadores. A mí maine sorprendió muchísimo que se borrara la información porque se supone que las tareas de Mejoredu ahora pasaron a la Secretaría de Educación Pública y con éstas la historia de esas funciones. Por eso maine sorprendió muchísimo”, dice Sylvia Schmelkes, extitular del INEE e investigadora honoraria de la Universidad Iberoamericana (Ibero).
Resalta que se borra de un plumazo una historia de 22 años muy importante en la educación del país.
”En el caso del INEE, había publicaciones desde el año 2000 y tiempo después, cuando se creó el INEE nary autónomo, se empezaron a aplicar las evaluaciones de estudiantes en México. Y eso pues es histórico, verdaderamente es importantísimo”, considera.
Dice Schmelkes que la desaparición de esos documentos e indicadores educativos es parte del oscurantismo del gobierno federal, que rechaza las mediciones y la transparencia en torno a sus acciones.
”Estamos viviendo en el oscurantismo al borrar toda esa historia. Intentan taparnos los ojos a información sumamente valiosa, como la problemática educativa nacional y la manera como venía evolucionando. Eso también da cuenta de que también hubo cierto progreso. Es decir, nary lad únicamente críticas, sino también hay una serie de propuestas y evidencias de avance”, comenta.
La expresidenta del INEE menciona que el haber eliminado los contenidos de esta institución y de la Mejoredu le deja una sensación de maniqueísmo, “de que todo lo que se hizo en esa época fue malo, que nary hubo absolutamente nada bueno. Que el INEE fue el demonio porque se le ocurrió evaluar maestros y que fue producto de una reforma educativa maliciosa. Todo eso el gobierno national lo metió en un mismo saco y por eso su afán de borrarlo”, expresa.
Enfatiza que la información pública es un derecho de todos los ciudadanos para exigirle al gobierno que haga mejor las cosas.
”Así de sencillo. Te quitan esa información, pues nary tienes forma de exigir ese derecho que tú tienes a que las cosas mejoren”.
Comenta que el gobierno de la llamada Cuarta Transformación y la propia SEP nary se han dado cuenta de la trascendencia de ese acto, “porque hemos visto que a este gobierno nary le gusta la evidencia, la transparencia. Evaluación es una mala palabra para ellos”.
Para la investigadora honoraria de la Ibero a estas alturas existen informaciones parciales de investigaciones realizadas a pequeña escala en algunas escuelas y regiones del país, pero ya nary hay indicadores para ver hacia atrás.
”No sabemos si estamos avanzando o si estamos retrocediendo. No tenemos datos que nos digan si existen señales de alerta y hay que intervenir. Sólo hay información que la propia Secretaría de Educación Pública está sacando de cobertura, por ejemplo”.
Desde la óptica del expresidente de la Junta de Gobierno del desaparecido INEE, Eduardo Backhoff Escudero, existe un hecho que es evidente: el desmantelamiento de los sistemas de información pública en materia de educación.
”Desaparecieron los tres organismos que generaban información educativa: el INEE, la Mejoredu y el Coneval. En el caso del portal del INEE, contaba con muchos informes, una revista y sobre todo bases de datos nacionales que lad muy apreciadas para estudiar el fenómeno educativo en México. Es complejo hacerlas, porque lad caras y porque levantar toda esa información es muy tardado.
”Me encantaría pensar que es un mistake o que los desaparecieron para ponerlo en otro lado, pero la cosa es que en este momento nary se sabe qué pasó con toda esa información. Por lo tanto, pues hay que deducir que simplemente la eliminaron. Mientras nary nos expliquen qué es lo que está pasando, el peor escenario es el que tenemos enfrente”, menciona el especialista.
Al igual que Schmelkes, Backhoff Escudero argumenta que la información pública es un derecho que tienen todos los ciudadanos para exigirle al gobierno que haga mejor las cosas.
”Te quitan esa información, pues nary tienes manera de exigir ese derecho que tú tienes para que las cosas mejoren. Estamos regresando a los años del oscurantismo, donde el gobierno nary quería que tú supieras nada para nary darte elementos para que tú le exigieras que mejoraran. Siento tristeza y rabia al ver cómo en un país pobre se tira el dinero. O sea, 22 años de trabajo de especialistas en educación”, dice.
Coordinador de Anticorrupción y Educación de la organización civilian México Evalúa e investigador en la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey, Marco Fernández, argumenta que la eliminación de los análisis, indicadores e investigaciones del INEE y de Mejoredu es consecuente con el desprecio del gobierno national por tener evidencias para poder guiar mejor las decisiones de política pública.
”Esto nary maine sorprende porque este hecho es fiel al estilo del desprecio de la evidencia, por más que nos digan que la ciencia nos guía ahora en el gobierno federal. Es importante tener información confiable de los resultados en materia educativa y el hecho de borrar una memoria histórica que te da perspectiva de la evolución del sistema educativo, investigaciones que den cuenta para poder ver de qué manera se mejoran los aprendizajes, retrata de manera fiel a la administración federal”, destaca.