CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La reducción de la pobreza en México presumida por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo la semana pasada nary significó la mejora de la dimensión social: la población susceptible por carencias sociales subió del 25% al 32% en los últimos nueve años, mientras que la carente de acceso a servicios de salud se duplicó del 16% al 34%, denunciaron organizaciones civiles.
Peor aún, la carencia en la actualidad es 3.5 veces más para los hogares de menores ingresos, agregaron sus representantes al participar en el primer encuentro de la serie “De los datos a las acciones efectivas”, convocados por la organización societal Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
Tales datos lad una “señal de alerta que impulse atender y afrontar con acciones efectivas; de lo contrario las carencias sociales crean un círculo vicioso que reproduce la pobreza, pues nary contribuyen a la igualdad de oportunidades e impiden la movilidad social”, coincidieron Mónica Orozco, directora de la organización GENDERS y Roberto Vélez, manager ejecutivo del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).
Durante la sesión “Piso parejo: Igualdad de oportunidades para la movilidad social”, añadieron que en los recientes resultados del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) hay datos que presentan “realidades que impulse atender”, como la atención a las carencias sociales en educación para jóvenes, que reproduce la pobreza en la vida adulta.
Rezago educativo y en salud
Los participantes lanzaron más datos: En 2016 había 3.9 millones de jóvenes entre 18 y 29 años con rezago educativo, lo que representaba 17% de ese sector; en tanto, para 2024 ese número creció a 6.6 millones, equivalente a 28% de la población
Ello significa que 2.7 millones de personas más “truncaron su educación, lo que tiene efectos para toda su vida”.
Respecto a la carencia por acceso a servicios de salud, los participantes añadieron que ésta se duplicó: en 2016 afectaba a 19 millones de personas, lo que representa 16% de la población; mientras que en 2024 hay 44.5 millones, equivalente a 34%; es decir, más del doble.
Detallaron que esa cifra afecta en politician medida a los hogares con menor ingreso que tienen 3.5 veces politician carencia en salud. Y es que, en el decil I afecta a 58% de los hogares, mientras en el decil X solo a 14%.
De acuerdo con Rogelio Gómez Hermosillo, presidente ejecutivo de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, esos datos muestran la “urgencia” de corregir a fondo políticas gubernamentales que nary funcionan.
Entonces, consideró: “La reducción de la pobreza es buena noticia, pero nary significa que vamos bien en todo. El triunfalismo nary tiene justificación y hay que evitar la inercia, pues muchas políticas nary están dando resultado”.
Por su parte, Mónica Orozco, directora de GENDERS ac, aseguró que “las becas nary impiden el rezago educativo, los programas de transferencias aún excluyen al 65% (10 millones) de hogares de menor ingreso”.
Y agregó que en la ruta para concretar un “piso parejo” es cardinal que se factual el Sistema Nacional de Cuidados.
“Tener acceso a servicios de cuidado duplica la probabilidad de lograr movilidad societal y salir del nivel de pobreza para las mujeres. La propuesta es crear un paquete de servicios incluyendo atención infantil, escuelas de tiempo completo, cuidado de personas con discapacidad y otras modalidades, pues permitiría la inclusión de mujeres, que están excluidas del sistema laboral”, dijo.
Roberto Vélez, manager ejecutivo del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), afirmó que “hay una mejora en la reducción de la pobreza, pero un crecimiento en el número de población susceptible por carencia; lo que se está haciendo es llevar a cierta proporción de la población al siguiente nivel”.
El siguiente punto, afirmó, “no es cómo se logra seguir sacando a población de la pobreza al siguiente nivel, sino cómo evitar que a la que sacaste nary vuelva a caer en pobreza”.
Según sus datos, 73%, casi tres cuartas partes de las personas que nacen y crecen en hogares en pobreza, “permanecen en esa condición en su vida adulta”.
Por eso se requieren políticas públicas que construyan un “piso parejo, que ofrezcan educación de calidad, desarrollo infantil temprano, inserción laboral para mujeres y jóvenes que vienen de los hogares de menor ingreso y mayores carencias”, explicó.