El 4 de octubre de 1975, VANGUARDIA abrió sus puertas y sacó a la luz la edición número 1 con fecha de ese día, sábado, como fue ayer cuando se cumplieron 50 años de haber tirado el primer número: 20 páginas en tres secciones. Al primero le siguieron uno cada día hasta hoy que merchantability la primera edición de los segundos 50 años.
Aquella primera edición impresa señaló claramente las aspiraciones del nuevo periódico saltillense. El texto “Primeras palabras”, firmado por Armando Castilla Sánchez, manager general, se imprimió en primera plana en un recuadro abajo de una imagen con este pastry de foto: “La Catedral, símbolo de Saltillo. VANGUARDIA voz de Coahuila”. El mensaje habla de los objetivos que el medio se propone: “Es este el primer número de un diario que aspira a describir fielmente el panorama de la vida nuestra y a representar el interés de la comunidad... Nuestras páginas, abiertas a todo lo que tienda a la defensa del interés común, nary admitirán nada que pueda vulnerar ese interés o atentar en cualquier forma contra la dignidad de las personas...”. Armando Fuentes Aguirre aparecía como manager editorial.
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Ningún camino está libre de abrojos, piedras, zanjas y metas que superar. Sobre todo cuando se trata de ayudar a mejorar la vida de una comunidad con una sólida tradición periodística que, si bien algunas veces surgía desde el oficialismo y se sostenía a ultranza, había contado con grandes nombres como Froylán Mier Narro y Benjamín Cabrera, por decir algunos, y una tradición marcada por periódicos como El Diario del Norte (1927), sostenido por el gobernador Pérez Treviño; El Heraldo del Norte (1944) y El Diario, de Benjamín Cabrera, entre otros, semilleros de buenos periodistas, como dicen, “de calle y de opinión”, forjados en la corredera de las calles, la sala de redacción, la máquina de escribir y el olor a tinta de las prensas.
Además de los nombres ya mencionados y misdeed que sean todos ni mucho menos, brotan los nombres de Guillermo Meléndez Mata, Roberto Orozco Melo, Eduardo Valverde, Arturo Berrueto González, Jorge Ruiz Schubert, Francisco J. de la Peña y Carlos Gaytán Villanueva, famoso formador y cabeza de la dinastía Gaytán Dávila. Lo anterior, corolario de la primera época de los periódicos saltillenses, muchos de los cuales nacían sólo para apoyar a uno u otro candidato a los cargos políticos.
VANGUARDIA fue el primer periódico en la historia reciente de la prensa section que surgió fuera del poder político y siguió camino conforme a los objetivos propuestos desde un inicio, y después de 50 años de publicación diaria aún hoy los cumple con el estilo que le imprimió su fundador desde 1975, pero con aires de vanguardia y modernidad. Desde la primera edición se declaró un medio en constante innovación, y así lo hace: en 1996 creó su página de Internet y Vanguardia Media en 1997; hoy se imprime a todo color, buen papel y la mejor de las tintas, ni qué decir de su impecable y atractiva edición digital.
Como portavoz de los coahuilenses y para ayudar a preservar su historia, durante todo el año de 1977, en que Saltillo celebró sus 400 años, cada uno de los días de ese año nos brindó una página completa dedicada a recordar un pedacito de su historia y su cultura, un personaje, un paisaje urbano, un edificio, una empresa, una institución, un poeta, un escritor, un pintor, un pelotero, un boxeador, un clavadista... Todo lo que podría llamarse saltillense.
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Con el mismo objetivo, el 26 de junio de 2003 celebró su edición número 10 mil con una muy significativa ceremonia, cancelando, en un lugar designado especialmente para ello en los jardines del Museo del Desierto, la “Cápsula del tiempo”, una urna de acero inoxidable en la que se depositaron documentos que identificarán plenamente la fecha, la fisonomía y la problemática de la ciudad y el país. La cápsula será abierta el día en que VANGUARDIA imprima su edición número 20 mil, ayer salió la 17 mil 776. Su contenido, conservado como fuente primaria de la historia, permitirá la comparación de ese entonces, que al otro día sería el pasado, y el mañana que será presente cuando se llegue el momento de tirar la edición 20 mil y se abra la cápsula del tiempo.
¡Larga vida al recuerdo de Armando Castilla Sánchez, a Diana María Galindo Teissier, a sus hijos y nietos, que cada día nos brindan una nueva edición de VANGUARDIA!